No me canso de leer comentarios acerca de la situación de México, sobretodo los comentarios sin aporte o cultura positiva. No me canso de leer comentarios sobre si es culpa de una mujer el haber sido desaparecida por querer divertirse en un horario no conveniente para los mas cerrados de mente. No me canso de leer acerca de si el gobierno que tenemos es el que merecemos, acerca también de la inseguridad y que sigue siendo culpa del gobierno y los demás. Pero si me canso de ver que muy pocos comentarios son acerca de qué estoy haciendo para que lo que consideramos malo no suceda, pocos comentarios para mejorar, pocos comentaros para eliminar la violencia de género y quitémosle género, la violencia en cualquier circunstancia.
El comentario que me incitó a escribir estas pequeñas líneas fue: «Todos muy gallitos aquí detrás de un celular o una computadora pero quien en realidad hace algo para que la situación del país cambie?» (sic). Se encuentra en una foto desgarradora donde menciona que un padre y sus 3 pequeños hijos fueron ejecutados en un estado con mucha violencia en el país. Y la razón de escribir esto es simple para mi, ¡SI!, soy muy gallo estando atrás de mi computadora, leyendo, informándome, estudiando la situación mundial, la forma en que la sociedad actúa, la forma en que tras comentarios nos destruimos aún sin conocernos y no por estas líneas quiero decir que soy un santo o pretendo parecer una gran persona, solamente quiero decir que ¡Si!, soy muy gallo en hacer algo muy sencillo para mi… educar a mis hijos con los valores necesarios y no para cambiar México o el mundo, sino para ser una persona agradable, querida, carismática, solidaria, pacífica, que inspire, etc., trasmitiendo esos valores haciéndoles ver lo que es correcto, haciéndolo parte de su genética y asegurándome que nada, ni nadie lo pueda quitar de ahí y así asegurándolo para mis nietos y siguientes generaciones y sin olvidar nunca que:
¡Se educa a través del ejemplo!
¡Si!, soy muy gallo y estoy seguro que si todos pusiéramos ese pequeño grano de arena, seríamos una mejor sociedad. No es fácil, definitivamente no lo es sabiendo que este comportamiento que tanto nos «sorprende» no es de hoy, es de miles de años de las mismas prácticas a través de distintas culturas y sobre todo la nuestra.
Este video que seguramente muchos hemos visto ya y que vale la pena no olvidar, demuestra de manera inversa y muy clara mi sentir.